Imagina un mundo donde las máquinas no solo obedecen órdenes, sino que piensan y actúan como nosotros. Un mundo donde robots inteligentes nos ayudan en las tareas del hogar, traducen idiomas en tiempo real y diagnostican enfermedades con precisión milimétrica.
Este mundo ya no es un sueño, es el futuro que nos promete la inteligencia artificial.