Pérdida generalizada de su hábitat adecuado y una redistribución del actual, ese es el futuro que les espera a las especies de peces marinas depredadoras como los tiburones, el atún o el pez espada, en el Océano Atlántico Noroccidental y el Golfo de México de aquí a 2100 debido al calentamiento global.
Los cambios en el hábitat y la distribución de estas especies suscitan cada vez mayor preocupación por parte las pesquerías asociadas y las repercusiones socioeconómicas asociadas al cambio climático.
Music by Jeongeun Lee from Pixabay